Lugar
despoblado de propiedad privada, pertenece al municipio de Puértolas (Huesca), a 1209 m
de altitud, enlaza por pista asfaltada con la via que arrancando en
la entrada de Añisclo nos lleva a Puértolas-Bestué. Paisaje de gran
belleza que a principios de siglo haría exclamar a Lucien Briet:
"Al
ver la garganta de Escuaín, se contempla una rotura prodigiosa, obra
de un gigantesco cataclismo de los tiempos del Génesis que hiende la
meseta a manera de los fiordos de Noruega". Abandonada la
población, fue comprada por un ganadero catalán para instalar una
explotación con vacuno, como quiera las cosas no dieron el resultado
apetecido el proyecto fue interrumpido y desestimado. La población
asentada en superficie kárstica está actualmente en la más completa
ruina. Iglesia de tipo popular: nave rectangular, puerta adovelada
a los pies y torre a meridión. |